Compani es un café pet-friendly que nace con la idea de crear un espacio acogedor para personas y animales. Parte de crear un espacio acogedor para personas y animales. Un espacio cómodo, cálido y sin pretensiones, pensado para disfrutar en compañía.

El reto era construir una identidad que comunicara cercanía y personalidad. Compani necesitaba una marca amable y diferenciada, que transmitiera confianza tanto para los humanos como para sus compañeros, y que se sintiera acogedora sin perder modernidad.

Se creó una identidad visual con un enfoque cálido, minimalista pero con peso. El diseño partió del concepto de compañía como vínculo emocional. Se exploraron distintas formas de representar esa relación humano-animal sin hacerlo literal.
En la fase de exploración se investigó el lenguaje corporal canino, en especial el movimiento de la cola como signo universal de vínculo positivo entre humanos y animales.
La identidad visual de Compani combina calidez, sencillez y una personalidad amable. El isotipo se construye con formas redondeadas y cercanas, acompañado por un pequeño trazo curvo que funciona como símbolo clave del sistema. Este gesto gráfico, inspirado en ese movimiento, transmite cercanía, alegría y conexión emocional. Se integra como recurso visual en layouts, composiciones o patrones, aportando ritmo y reforzando el tono afectivo de la marca sin necesidad de usar ilustraciones evidentes.
La paleta de color neutra, las tipografías que contrastan y un sistema visual editorial permiten que la marca respire, generando una experiencia coherente tanto en el espacio como en sus piezas gráficas. La identidad posiciona a Compani como una marca acogedora y coherente, con un lenguaje visual que conecta con una comunidad sensible al detalle y al bienestar animal. La marca genera afinidad inmediata, tanto en redes como en el espacio físico, y destaca frente a otras cafeterías por su personalidad única y cuidada.